Hacía tiempo, que no pasaba por aquí y aunque sea tarde. La razón de recomendar almacenar no sólo las cintas VHS, sino el material magnético en general, es evitar, que la cinta se "cuartee" y pierda la uniformidad en su enrollado. Eso ocurre con una cinta en horizontal.
El sistema VHS era el peor, mecánicamente de los tres, que estuvieron en uso. Sin contar el de Phillips allá por 1.971 el VCR, que fue efímero.
El sistema VHS sometía la cinta a una torsión muy superior al Beta y a un enhebrado muy tosco en su mecánica. Así que una cinta no arrollada uniformemente, aceleraba el desgaste de las cabezas y de la cinta. Por eso la mejor posición para archivar, es la vertical y totalmente bobinada en posición inferior. Lo mismo con los cartuchos de casette musicales. Cuando se acabe o empiece a usar una cinta. Yo siempre seguí dos reglas. La primera un avance hacia al final y luego automáticamente rebobinar al principio. Antes reproducir, lo mismo rebobinado en avance y luego a posición del principio. Destensa la cinta. De este modo, mis VHS y mis reproductores aguantaron muchos años.
También es importante no dejarlas a medio bobinar, pues los expertos consideraban que los micro campos magnéticos a uno y otro lado de la cinta, podían influir en la degradación de lo grabado.
Me imagino que hoy el almacenamiento magnético analógico se haya reconvertido a digital sin pérdidas en los archivos sonoros de los sellos de la compañias de discos.