Asumo que prefiero el cangrejo al sucedáneo de cangrejo. Por mucho que se le quiera parecer.
No sé qué opinaría una muchacha que tabajó en casa y que un día me dijo refiriéndose a Will Smith al verlo en El príncipe de Bel-Air: "¡Qué bien habla español este negro!".
Cada cual con su visión y sus necesidades personales. Que no necesitáis oír al actor creador del personaje, pues nada, a oír al excelente suplantador. El mundo no se va a parar por eso...