No obstante en ciertos argumentos que se han expuesto aquí, se han mezclado churras con medinas. Yo no considero ocioso el pasar la tarde en un acontecimiento o evento familiar con un espectáculo como un concierto o un partido de fútbol. La sociedad de hoy en día se maleado precisamente por la incompatibilidad de esos putos horarios de hoy en día con la vida familiar, eso que se llama conciliación. Es que en otro orden de cosas, manda huevos que hayan horarios todavía que implique que a media jornada tengas dos incluso tres horas para comer y después tengas que volver a reincorporarte para tener que salir a las 7 u 8 de la tarde.