El próximo mes de septiembre River Phoenix estrenará su nueva película. Sí, River. No su hermano Joaquin. El director George Sluizer ha concluido la que fuera la última película de la malograda estrella hollywoodiense casi 20 años después de la muerte de su protagonista. Dark Blood, que así se llama la cinta, será estrenada en el 2012 Netherlands Film Festival acabando así con un periplo que ha durado años y que ha costado más de un quebradero de cabeza al realizador alemán.
Cuando la noche de Halloween de 1993 River Phoenix moría víctima de una crisis cardíaca por sobredosis, Sluizer ya había rodado cuatro quintas partes del guión. El desgraciado suceso dejó el proyecto en un cajón sin terminar y fue el año pasado cuando el director, que entonces contaba con 79 años, decidió retomarlo. Tuvo que devanarse los sesos para encontrar la forma de cerrar la historia sin su protagonista. "Mi padre tuvo que encontrar una solución creativa", ha explicado su hija. Y esta no ha sido otra que usar una voz en off. Intentó que fuese la de Joaquin Phoenix, pero el actor no aceptó.
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Más allá de la solución creativa mencionada, Sluizer también ha necesitado ayuda para enfrentarse a posibles complicaciones legales. La productora Eyeworks ha sido quien le ha ayudado y el estreno está programado para este otoño. De momento, solo en el mencionado festival.
Dark Blood completa su cartel con los actores Jonathan Pryce y Judy Davis y cuenta la historia de Boy (River Phoenix), un joven viudo que vive en el desierto en una zona donde se hacen pruebas nucleares. Vive como un ermitaño esperando que llegue el fin del mundo. En su soledad tropieza con una pareja que recorre el desierto y que se queda tirada por un problema mecánico. Lo que no sospechan es que Boy pasará de ser su salvador a su captor tras enamorarse de la chica.
El festival, además de estrenar Dark Blood, realizará una retrospectiva de su carrera y lanzará un libro que repasa la vida de este director octogenario. Sluizer fue el encargado de llevar al cine hace ya diez años la novela de José Saramago, La balsa de piedra, y es conocido sobre todo por su película Secuestrada (1993), protagonizada por Kiefer Sutherland, Jeff Bridges y Sandra Bullock. Se trata del remake americano de Desaparecida, rodada por él mismo en 1988.
En el momento de su muerte y con solo 23 años, River Phoenix era uno de los actores más solicitados del momento. Su carrera prometía ser brillante. Sin embargo, las drogas acabaron con ella convirtiéndolo en un mito como la velocidad lo hizo con James Dean. Phoenix protagonizó películas que lo encumbraron entre las adolescentes de entonces como Cuenta conmigo y Mi Idaho privado. También fue el joven Indiana Jones en La última cruzada. En su corta trayectoria, su hito fue la nominación al Oscar como secundario en 1988 por Un lugar en ninguna parte, de Sidney Lumet.
El Joven Indy volverá a las pantallas de los cines casi dos décadas después de su muerte. Una gran y emotiva noticia para todo seguidor del actor.