Leyendo comentarios, abro un par de lineas de argumentación (si se ha hablado antes, lo siento):
- Las expectativas con las que uno afronta las películas, influye en nuestra percepción final. Yo fui a ver Los amantes pasajeros previendo que no sería, ni por asomo, una de esas comedias fantásticas de los 80 del manchego (principalmente, porque ni estamos en los 80 ni los actores eran los mismos, ni Pedro ya es el mismo: todo ha cambiado, cosa normal), pero esperando pasarlo bien, y la verdad es que ni miré el reloj y me entretuvo. Ahora mismo, es verdad que no ha calado demasiado en mi memoria, cosa inaudita en mí, pero cumplió con mis expectativas.
- La "indulgencia" con determinados directores o actores. Yo creo que se da más con los directores. Me refiero a que le tenemos tanta devoción a determinados personajes (porque en el pasado, todo o casi todo lo que han hecho nos parece de notable para arriba) que hagan lo que hagan, siempre lo miraremos con otros ojos. Y no me negaréis que, cambiando el apellido, todos tenemos alguno o algunos favoritos.
En resumen, que aparte del hecho objetivo de que ciertos films tienen una mierda de guión, que hace que no puedas coger (agarrar, en algunas zonas de sudamérica

) la historia por ningún lado, o que estén mal interpretadas o dirigidas..., hay elementos subjetivos que hacen que lo que para unos sea una mierda, para otros no sea "tanta mierda".