Cerebrín, que lo que te he ofrecido es en VO procedente del dvd, con sus consiguientes subtítulos...
Del doblaje, huir como de la peste...
Cerebrín, que lo que te he ofrecido es en VO procedente del dvd, con sus consiguientes subtítulos...
Del doblaje, huir como de la peste...
Hombre, a mi la primera vez me gusta ver la peli doblada para no perderme ningún detalle. Pero bueno, estoy con los dos liados. Ah, y ya la encontre Weintraub, muchas gracias, lo que ocurria es que como hay tan pocas fuentes, no me aparecia.
Hombre, a mi la primera vez me gusta ver la peli doblada para no perderme ningún detalle. Pero bueno, estoy con los dos liados. Ah, y ya la encontre Weintraub, muchas gracias, lo que ocurria es que como hay tan poca "gente", no me aparecia.
Yo es que con los subtítulos no me pierdo detalle alguno. De hecho, suelo perderme más detalles con el doblaje, porque, por lo que tengo comprobado, algo así como el 75 % de las veces el doblaje cambia el argumento por las buenas...
Ahí te has "pasau" ¿no? Y ten en cuenta que los subtítulos tampoco suelen ser nada fieles al diálogo (ni siquiera los del idioma original).algo así como el 75 % de las veces el doblaje cambia el argumento por las buenas...
¿Pasau? En absoluto... Cuando confronto subtítulos con el audio inglés, hay veces que se van por los cerros de Úbeda, cierto es. Pero no tanto como por medio del doblaje, que se inventan MONTONES Y MONTONES de cosas por la jeta. De hecho, creo que hasta me quedo corto. Y no son cambios nimios para ajustar con los labios, y esas chorradas, sino alteraciones totales de la trama...Iniciado por Huw Morgan
Sé que en algunas ocasiones se pasan pero creo que en casos concretos y sigo pensando que hay bastantes películas que es mejor ver dobladas (si no dominas la v.o. claro). Siempre me viene a la cabeza "Uno, dos, Tres" de Wilder donde creo que te acabas perdiendo media película leyendo subtítulos.
Yo no soy integrista en ninguno de los dos casos, elijo en función de qué peli voy a ver.
Hombre, de todo hay.
Por que de Berlanga, por ejemplo, no se me ocurriria nunca ver una pelicula con subtitulos, más que nada, por la de detalles que hay, de personajes en segundo plano y matices, que mirando los subtitulos, seguramente me perderia.
Y a lo que dice Bela, un caso muy sangrante de doblajes, no es en nuestro país, es en Usa, en la que antiguamente al menos, remontaban las peliculas, y las doblaban inventandose tramas nuevas y cosas por el estilo. Uno de los casos más graves es el de "El Vengador Escarlata", en ingles "Bloody Pit Of Horror" en Usa, en la que eliminan como 15 minutos de metraje, en el que, sin saber como lo explicaran, no se ve como consiguen entrar en el castillo, ni que demonios hacian en las catacumbas cuando despiertan el espiritu del fantasma, entre otras cosas.
Vamos, que de todo hay. Por ejemplo, a mi no se me ocurriria ver "El Hombre Invisible" con el penoso doblaje moderno, y perderme la voz de Claude Rains, que es el 99% del personaje.
Yo jamás vería una peli de Berlanga con subtítulos, cierto. Entiendo perfectamente el español.Iniciado por cerebrin
No me refiero a eso. Que, ciertamente, es criminal. Sino a CUALQUIER película, de estreno o clásica, que por medio del doblaje cambian detalles argumentales... O añaden frases que no existen cuando el actor está de espaldas. O, al contrario, quitan. Detalles así. ¡¿Pero no os habéis dado cuenta?!Iniciado por cerebrin
Por supuesto. Pero es que, en todos los casos, se cargan la credibilidad de las películas con algo falso y postizo.Iniciado por cerebrin
Y no entremos ya en casos de pelis antiguas donde, además, se cargan la partitura de Miklós Rózsa y en su lugar meten música de orquesta o de Pink Floyd....
Yo sí he notado a menudo lo que comenta Bela. Me gusta oír a los actores. A ver cuándo iventan el chip de la poliglotez y así no tendremos problemas en mirar la mosca que revolotea por la cabeza del personaje del fondo...
Estaría bien un programa informático que efectuase traducción simultánea: pero creando voces artificiales en tu idioma con exactamente la misma voz y entonaciones del actor original, traduciendo fielmente... Verías, oirías exactamente los mismo que en el original, pero en tu idioma...
Obviamente la entonación de cada idioma es diferente y no sería posible pero lo de imitar de una forma razonablemente fiel el tono y timbre de voz estoy seguro de que se llegará a conseguir.Iniciado por Bela Karloff
El doblaje es SIEMPRE una falsificación. Y no entiendo como profesionales de la "interpretación" son capaces de usurpar las voces de sus colegas para perpetrar semejante impostura.
En cuanto a los subtítulos, a poco que tengas una cierta rapidez de lectura, considero prácticamente imposible que te pierdas algo de la imágen correspondiente. Y desde luego con el doblaje hay algo que te pierdes siempre: la interpretación de los actores (de la que, en el mejor de los casos, escucharás una imitación aproximada).
Si Fernan-Gómez, o Isbert, o López Vázquez...no serían lo mismo sin su voz, sin sus inflexiones...¿por qué va a resultar menos fraudulento sustituir las voces de Newman, Willis, Pacino...?
BelaHombre, alguna de las coproducciones con Italia, como "Los Jueves Milagro", o "El Verdugo"...cerebrin escribió:
Por que de Berlanga, por ejemplo, no se me ocurriria nunca ver una pelicula con subtitulos, más que nada, por la de detalles que hay, de personajes en segundo plano y matices, que mirando los subtitulos, seguramente me perderia.
Yo jamás vería una peli de Berlanga con subtítulos, cierto. Entiendo perfectamente el español.
Por ese razonamiento difícilmente soportarías el cine Twist porque prácticamente cualquier película es una "falsificación" de una obra literaria, hecho real, leyenda, etc donde un conjunto de "usurpadores" se arroga el derecho de "perpetrar semejante impostura".El doblaje es SIEMPRE una falsificación. Y no entiendo como profesionales de la "interpretación" son capaces de usurpar las voces de sus colegas para perpetrar semejante impostura.
Yo sin embargo no veo falsificaciones, usurpadores ni imposturas en ningún caso, veo versiones de una película.
Que te pierdes contenido visual es algo innegable, puedes discutir cuánto según tu entrenamiento y agudeza visual.En cuanto a los subtítulos, a poco que tengas una cierta rapidez de lectura, considero prácticamente imposible que te pierdas algo de la imágen correspondiente. Y desde luego con el doblaje hay algo que te pierdes siempre: la interpretación de los actores (de la que, en el mejor de los casos, escucharás una imitación aproximada).
De igual modo está claro que te pierdes íntegramente la interpretción verbal de los actores (no la interpretación al completo) pero, por poder, la del actor-doblador podría ser incluso superior a la del actor original. Es que siempre damos por supuesto que es sustancialmente peor, y eso es falso.
Existe una tendencia, consustancial al ser humano, a infravalorar la información gestual cuando existen multitud de estudios que le otorgan un papel fundamental en la comunicación humana. Así, somos plenamente conscientes de habernos perdido parte del mensaje cuando no escuchamos alguna palabra pero no de igual forma si se trata de un movimiento corporal.
Vamos, que veamos la peli como la veamos siempre nos perderemos algo importante. Lo que creo que hay que hacer es pararse a analizar en cada caso concreto dónde la pédida es mayor y no rechazar por sistema ninguna de las versiones y dejar la pereza que sienten algunos al ver la VOS y el esnobismo de algunos defensores de esta.
Por otra parte nunca he podido entender el completo desinterés por ver una versión doblada y, a la vez, mantener la curiosidad por ver la versión de cines, la del director, la censurada, la coloreada, la alargada, etc. Cuando menos es una curiosidad más, ¿por qué ese rechazo visceral?
En primer lugar, me declaro antidoblaje en un 70 % (es decir, todas aquellas películas dobladas desde los 80 para acá; al resto sólo les tengo cariño porque fue así como las vi), pero es que, sin ir más lejos, ayer mismo puse a mis alumnos (de 11 años) El increíble hombre menguante -sí, en blanco y negro, y les encantó- en versión doblada, y en aquellos pasajes con diálogo, la música que suena de fondo, que no tiene nada que ver con la original, era perfectamente identificable por haberla oído en otras películas (por ejemplo, en el doblaje de El sueño eterno). Vamos, que se ve que en los estudios no había mucho material del que extraer la música. Chapuzas y más chapuzas.
Otra cuestión es la calidad de las voces. También ayer me dispuse a ver en versión española La monja -recordemos que es un filme de aquí-, por lo del DTS, pero tuve que optar por la versión original inglesa, ya que las voces de doblaje eran de juzgado de guardia, algo que se está haciendo demasiado habitual.
Por mucho imaginación que le eche, no me imagino a Pepe Isbert doblado en inglés ( ¡Chencho, my son! ), como tampoco me apetece escuchar a Bela Lugosi con doblajes que amputan sensiblemente sus pecualiaridades en la dicción. Son sólo dos ejemplos. Sobre la superioridad de las voces, me parece un argumento incomprensible: ¿Es mejor la voz de Constantino Romero, por su potencia y pronunciación, que la más suave de Eastwood? Simplemente, que no es la del actor americano, y todo lo demás a mí, como espectador/consumidor, me parece una falsificación de la obra. Otra cosa es que yo admita ese falseamiento y lo acate como regla de juego, más que nada por la comodidad de no leer, que finalmente es de lo que se trata.De igual modo está claro que te pierdes íntegramente la voz de los actores (no la interpretación al completo, sólo la verbal) pero, por poder, la del actor-doblador podría ser incluso superior a la del actor original. Es que siempre damos por supuesto que es sustancialmente peor, y eso es falso.
Un saludo.
De acuerdo al 100 % con Pepe...
Está claro que cuanto más familiar te resulta mayor es la dificultad para admitir versiones pero eso no es sólo aplicable a las voces, castodos los escritores reniegan de las adaptaciones cinematográfica de sus obras y pueden ser obras maestrasPor mucho imaginación que le eche, no me imagino a Pepe Isbert doblado en inglés ( ¡Chencho, my son! ), como tampoco me apetece escuchar a Bela Lugosi con doblajes que amputan sensiblemente sus pecualiaridades en la dicción. Son sólo dos ejemplos.
Lo he editado, no me refería a la voz en sí, sino a la interpretación del doblador.Sobre la superioridad de las voces, me parece un argumento incomprensible: ¿Es mejor la voz de Constantino Romero, por su potencia y pronunciación, que la más suave de Eastwood? Simplemente, que no es la del actor americano, y todo lo demás a mí, como espectador/consumidor, me parece una falsificación de la obra. Otra cosa es que yo admita ese falseamiento y lo acate como regla de juego, más que nada por la comodidad de no leer, que finalmente es de lo que se trata.
¡Chencho, my son!
Sublime...
¿Hasta qué punto se digiere eso de que el doblador interpreta mejor? El actor es él con su voz y punto. Es que sin su voz no se puede valorar su trabajo. Y si para algunos puede implicar que el doblador interpreta mejor, otros dirán que sobreactúa. Estoy con lo natural. Prefiero ver a Jordan volando hacia la canasta impulsado por sus músculos, que a esos tipos que saltan con un trampolín para meter la pelota en el aro. No es lo mismo. Pos eso...
Huw Morgan, no sé qué tienen que ver las adaptaciones literarias con el doblaje. Cuando veo "El sueño eterno" no estoy leyendo la novela sino disfrutando de una adaptación al cine ; cuando, en lugar de oir a Humphrey Bogart, oigo al doblador de turno estoy ante una falsificación: no una "versión" sino una perversión, una mala imitación de Bogart, una usurpación de su trabajo actoral.
No puedo considerar que cada vez que doblan "E.T." o "Tiburón" o "Casablanca" han hecho nuevas "versiones" de la película, remakes, sino nuevas falsificaciones.
El doblador no debería ni mejorar ni empeorar una actuación. Y esos argumentos de que los dobladores españoles son "tan buenos que salvan interpretaciones originales deplorables" o que "si oyésemos la voz de Pato Donald de Bogart la gente se moriría de risa" o "doblamos en un tono de voz más alto porque los anglosajones tienden a susurrar y el público no está acostumbrado a eso", se los llevo oyendo a dobladores y a directores de doblaje muchos años, y con ellos no hacen más que demostrar la impostura de su oficio.
En cuanto a la expresión corporal, por supuesto que me parece importante; pero eso no hace que un actor (exceptuando a Harpo y a Marlee Matlin) no pierda gran parte de su personalidad como tal si lo privamos de su voz, tenga ésta los rasgos que tenga.
Cuando se han oido las suficientes versiones originales y oyes que un mismo doblador "interpreta" a Pacino y De Niro, o que otro hace lo mismo con P.Newman y M. Caine, y otro a J. Wayne y a B. Lancaster y a G. Cooper, o que una dobladora se ha pasado la vida poniendole voz de pito a todo niño que se haya asomado a una pantalla..., no puedes volver a tomarte en serio argumento alguno a favor del doblaje. Cada actor tiene SU voz, como tiene SU cara y SUS
gestos y SU técnica.
Como decía Cabrera Infante, "No es que el doblaje pueda servir a una forma obsoleta de censura, sino que el mismo doblaje es una forma de censura".
Borges argumentaba que "peor que el doblaje es la conciencia general de una sustitución, de un engaño".
Y si se tiene la tentación de pensar que preferir la versión original a la doblada es un mero snobismo, sólo hay que ver la maldita gracia que tiene "To be or not to be" doblada frente al original, o sentir la vergüenza ajena que provoca cambiar varias veces la opción v.o. a español (y viceversa) en un dvd o en Canal Satélite Digital. Esa es una experiencia más que suficiente para estimar la abismal diferencia.
en el cine europeo, español, frances italiano o aleman, el doblaje ra técnica habitual, la excepción era el sonido directo. Muchos actores y actrices sólo prestaban su imagen, su voz no era atractiva y era sustituida por la de un doblador profesional. En las coproducciones europeas de la epoca, cada actor rodaba en su idioma materno y no había como tal una version original.
Incluso en el cine en lengua inglesa se ha utilizado el doblaje, y en el caso de los musicales era práctica habitual.
Supongo que en un fururo no muy lejano, no habra actores, se diseñaran imagenes y voces y se nos acabaran estas discusiones.
Que cada uno pueda elegir y eso ya podemos gracias al dvd.
Obviamente que podemos elegir, pero lo natural es lo natural. Mañana sale Chiquito en la tele doblado por Plácido Domingo, y al día siguiente nadie elogiará la voz de Chiquito. Hablamos de valorar de manera más íntegra las facetas creativas del cine; en este caso a los actores.
Efectivamente, la falta de una técnica adecuada hizo que en el cine europeo se practicase el doblaje más de lo que hubiera sido deseable. Y los actores y actrices que no se doblaban a sí mismos eran considerados malos actores, y nadie se acuerda de ellos a día de hoy. La práctica, obligada por las limitaciones técnicas, era tan poco satisfactoria para todos que, en cuanto se accedió a buenos equipos de sonido, dejó de utilizarse.
El peyorativo término "actor de coproducción" se forjó durante los años de ebullición de éstas para designar despectivamente a aquellos "mimos" que se limitaban a poner caras mientras otros leían el guión desde los estudios de doblaje. Mucho se hablaba entonces cuando uno de estos actores era considerado despistadamente como acreedor a un premio (¿había que dárselo al que gesticulaba o a su voz en la cabina?).
Si uno va a un teatro a disfrutar, por ejemplo, de la interpretación de Lola Herrera en "5 horas con Mario" y resulta que la actriz se limita a mover los labios en el escenario mientras otra persona lee su monólogo tras las cortinas, consideraremos que el espectáculo es un fraude grotesco. ¿Por qué hay que considerar menos engañoso el que alguien sustituya las voces de Caine y Olivier en "La huella"?
En cuanto a los musicales, es algo obvio que no todos los actores están dotados para aguantar el peso de un musical y, especialmente en la época de las adaptaciones de espectáculos de Broadway, se optó, desgraciadamente, por doblar a actores que no cantaban ("Cantando bajo la lluvia" se encargó de parodiarlo sin contemplaciones). La decisión fue muy criticada y a alguna actriz (recordemos a A. Hepburn en "My fair lady") le costó un buen disgusto en su momento.
Evidentemente que cada cual es libre de elegir, y de opinar. Ni lo uno ni lo otro cambiará el hecho de que eliminar la voz de un actor y suplantarla por otra sea siempre una falsificación y una aberración. Y expresarlo no es ser maximalista, es constatar una realidad.
Hombre, sobre tu última frase no estoy nada de acuerdo. Si un director, el autor de la obra cinematográfica decide doblar a un actor por la razón que sea, no me parece ninguna manipulación. Es su obra y es una técnica tan válida como otra cualquiera. Un ejemplo, el doblaje de Jose Luis Lopez Vazquez en Mi Querida Señorita, o los de las canciones en los musicales, por cierto, la propia Debbie Reynolds estaba doblada en las canciones de "Cantando sobre la lluvia".
Grandes películas como El Gatopardo, Rocco y sus hermanos, lowesterns de Sergio Leone, no habrían existido sin el doblaje. Los actores en el cine no sólo actúan con su voz, sino con sus caras, movimientos, sus miradas.
Dicho eso, a mi me gusta ver cine en VO, salvo en el caso de películas vistas de niño en las que la nostalgia me pide verlas dobladas. Y siempre en VO en películas de los 30 y 40 en la que al cambio de voces se une una manipulacion total de la música y efectos de sonido.