El rubio platino me resulta fascinante en esta época, sin embargo, luego cuando llega el color me gusta bastante menos. Por ejemplo, veo a Eleanor Parker de rubia en "Sonrisas y lágrimas", y sí, potencia su aristocracia y su orgullo, pero echo de menos su look habitual. También es verdad que
depende de cómo resalte su cabello en el escenario o se conjunte con su vestuario; aquí tenemos el ejemplo de Lana Turner en "Los Tres Mosqueteros" que mencioné antes. El negro es su color y personifica su carácter. Parece una vampira de la Hammer.