A veces ni eso es una opción.
Robert Harris removió cielo y tierra para que MGM le dejará restaurar El Álamo. Estuvo años detrás, con apoyos de directores e incluso tenía los fondos para cubrir esa restauración. Simplemente no le dejaron, y el negativo de una de las dos versiones ya ha pasado la frontera de "irrecuperable".