Creo que fshtravis lo ha explicado muy bien. Es una película que deja caer casi todo su peso en la brutal presencia de Johnny Depp y los actores que lo acompañan. El metraje no se hace pesado en absoluto, pero el modo elegido por Scott Cooper para contar la historia es casi el de un testigo distante. También es cierto que en la película pesan mucho las películas que sobre el tema de las mafias se han rodado y estamos ya curados de espanto ante algunas escenas tremendo salvajismo. Resulta imposible no acordarse (vamos, que es casi igual) de una de las famosa escenas de Joe Pesci en Uno de los nuestros en una cena que tiene lugar en Black Mass.
Como dice el compañero, quedan muchos flecos sueltos, historias que quedan prácticamente apuntadas y que habrían merecido más atención, como la interesante historia de los hermanos Bulger (origen de la investigación de los periodistas que dieron con la trama). La coda final se me hace un poco pesada y previsible, con el consabido texto sobre la pantalla de lo que ocurrió después con los personajes.
Es una película entretenida, por momentos interesantes y con un imprescindible recital interpretativo, por el cual merece la pena verla.