Muy divertido slasher, que sin pretender innovar ni inventar nada (y más siendo Eli Roth un entendido del género), ni tampoco siendo una parodia, aporta frescura a un género en el que parece estar todo inventado hace décadas. Espero que tenga éxito (además estas pelis de terror se rentabilizan rápido) y haya secuela, la he disfrutado más que las últimas de Halloween o Scream.