Maravillosas. No por casualidad, las tres dirigidas por Wyler, a quien admiraba y amaba.
Maravillosas. No por casualidad, las tres dirigidas por Wyler, a quien admiraba y amaba.
Mi blog: www.criticodecine.es
La propia Guerra Fría que había dentro de E.E.U.U a comienzos de los '50 dibuja un terreno muy hostil y presionador contra, no ya los comunistas, sino los demócratas liberales. He estado leyendo el tour que hicieron acompañando la candidatura del demócrata Adlai Stevenson para las elecciones de 1952 tanto Bogart y Bacall como Robert Ryan y su mujer, con anécdotas muy simpáticas por cierto, y que llevó finalmente a Eisenhower a la Casa Blanca. Esto le sentó como un tiro a Ryan, que tenía una gran fobia hacia lo militar y su generales y altos mandos; era un hombre tan sensible, alejado de la imagen que ofrecían sus roles tan violentos, alejado del glamour de Hollywood, tan dotado para las humanidades y tan ferviente defensor de la educación para forjar ciudadanos que pensaran por sí mismos (llegó a abrir una escuela junto a su esposa y varias personas más para TODOS los que quisieran sin exclusión de raza o credo) que comprobar que el mundo estaba cayendo en múltiples tumultos le llevó a sus temporadas depresivas - algo que ya viene siendo habitual en las biografías de actores y actrices que voy leyendo -. Y desde luego para los liberales que creían en un mundo mejor dentro de E.E.U.U hubo un tránsito de dos interminables décadas que anímicamente les cayó como una losa, afectó a sus carreras en mayor o menor medida y terminó por socavar su salud (dicho sea de paso, se tiene constancia al menos desde 1952 que la nicotina del tabaco producía cáncer de pulmón).
Así que nada de que el dinero trae la felicidad, al menos si en la infancia o adolescencia persisten traumas que afloran en la madurez. Ese mito ya debería estar enterrado hace tiempo.
La peli nos presenta a 3 niñas en el colegio hasta que son adultas en 1930s...con documentación de lo que pasaba en la sociedad del momento como el derecho al voto de la mujer etc...Ann Dvorak es Vivian la popular de peque y la que mejor situada está socialmente cuando se reencuentran.
La traviesa y atrevida Mary es Joan Blondell y Bette Davis es Ruth la más aplicada.Mary y Ruth van dando tumbos en sus trabajos y vida y observan la suerte de Vivian que se queja de aburrimiento...y llegará el drama con pinceladas de cine negro y todo pululando Bogart en un pequeño rol.
Sin ser un peliculon,se ve bastante bien...el reencuentro de las 3 mujeres da paso a una trama y desenlace bien llevado con especial relevancia para Ann Dvorak la que paradojicamente acaba en una situación lamentable con las infulas que se daba de pequeña y espetando que acabaría fatal la pizpireta Mary,con un final un poco deudor de mala mujer que ha de pagar
Momentos BETTE
6.8/10
Última edición por hannaben; 03/10/2021 a las 01:14
Curiosa la base de 3 on a match, la peli revisada por hannaben. Aquí se tituló Tres vidas de mujer, con lo que no se enteraron de nada.
Para no destripar la trama (aunque no creo que lo haga) solo digo que había una superstición sobre prender una cerilla y encender con ella hasta tres cigarrillos de tres personas distintas. También el origen de esa superstición, el real, es para mear y no echar gota.
Mi blog: www.criticodecine.es
Mi blog: www.criticodecine.es
Última edición por hannaben; 04/10/2021 a las 19:39
Proxima review
Me guiaré muy mucho por la que hizo el compi Otto
El pre-code perteneció a las mujeres, so pena de que la transición del silente al sonoro era muy reciente y quedaba mucho por ajustar. Y fue un periodo breve, muy breve. La historia del cine norteamericano sin el Código hays hubiese sido muy diferente, y por ende, la del siglo XX. El Código fue papanatismo e hipocresía hasta el final que benefició a vendedores de cuchicheos como la Hopper y la Parsons. Una búsqueda de adoctrinamiento retrógrado y durmiente de conciencias. Las "cochinadas" en público no; sólo en privado
Esa última frase, que ha servido de resumen, es lo que ha guiado a la sociedad norteamericana durante muchas décadas del siglo XX. Si acaso ha traído algo bueno este siglo, más allá de pandemias y populismos, es el cuestionamiento de muchas cosas por las nuevas generaciones, y en muchos casos, impulsado por las mujeres.
Aquí también tuvimos nuestra ración (duradera, lastimosamente) de adoctrinamiento político, religioso, moral, cultural, etc.....
Mi blog: www.criticodecine.es
Hay una teoría con cierta base justificatoria que dice que "todo progreso trae atraso". Surgen movimientos que contrarrestan y buscan aminorar esas fuerzas cambiantes y traen moratorias y justificantes de todo tipo. Así ha sido la historia de la humanidad, la de las llamadas grandes naciones o estados: décadas hacia adelante, dácadas hacia atrás; épocas siniestras; épocas esperanzadoras; el siglo XX, en un intervalo de tiempo históricamente tan breve, ha traído una cantidad y aceleración de actos contradictorios que me hace estremecerme con lo que nos puede dejar el siglo XXI con una tecnología como motor de cambio tan brutal que no sé si muchos de nosotros estamos preparados para acometer. Da vértigo la de noticias y acontecimientos que surgen, se solapan y se almacenan en el baúl de los recuerdos como para no propiciar atmósferas crispadas. Dos cosas permanecen inalterables y las dos están de actualidad: el Dios Dinero (Panamá papers seas de inquierdas, derechas u hombre lobo, y que deja, entre otras, la impresión de que los conceptos de "ley" y "justicia" no van de la mano) y que la Diosa Naturaleza siempre tiene razón.
La dependencia de la tecnología como nos descuidemos nos va a dejar desprotegidos, viendo lo que está sucediendo con la subida de la inflación en buena parte por la electricidad, incluso para algo tan básico como el ocio, véase la caída de servidores de Internet que propician que la Bolsa de New York se deje momentáneamente un potosí. Aún no lo sabemos, o no somos plenamente conscientes de ello, pero la Diosa Naturaleza es más poderoso que el Dios Dinero.
Pues sí. Así parece funcionar la sociedad. Después de una fase de progreso, viene otra de retroceso. Es curioso cómo se habla de los años 20 como modernos y después, aparecen los movimientos dictatoriales.
Mi blog: www.criticodecine.es
¿Te refieres a los años 20 del siglo XX o del XXI? Eso sí, si hubiera una Tercera Guerra Mundial hay material como para que gran parte de la humanidad retroceda a la Edad de Hierro sin causar tantaos muertos. Basta con "desencchufarnos" al ritmo de vida actual. Y en ciernes un remedo de "Guerra Fría" entre China y USA; es lo que decía Hitchcok con gracia sobre los intérpretes y el ganado, solo que aplicado a los ciudadanos de a pie.... hay mucho nostálgico de la mano dura aplicada hacia el gentío, y bastantes te compran ese discurso encima...
Bette está francamente bien en la peli desaprovechadísima hasta decir basta...pondré unas cuantas cosas de ella y hasta la próxima qué ganas de llegar a 1934 en adelante
Última edición por hannaben; 05/10/2021 a las 23:51
Bette Davis, c. 1935 - photo portrait by Bert Longworth
Última edición por hannaben; 06/10/2021 a las 19:33
Cuando empezó el conflicto con la Crawford?¿ o venía de antes...
http://franchottone.blogspot.com/201...rous-1935.html
Galería de fotos:
Spoiler:
Mañana: Lombard, Loy, Goddard, Oberon, Garbo, Tracy, Garson, Bergman, De Havilland and more en el hilo "pre-code".
The Cabin in the Cotton
Bette Davis as Madge Norwood
Última edición por hannaben; 07/10/2021 a las 02:47
Jo, de rubia me ha sorprendido muy gratamente la Davis. Tiene mucho morbo. Y está guapa la tía. Ahora que lo pienso, creo que era de estas personas que ganaba mucho al natural, y no al revés, como otras estrellas.
Mi blog: www.criticodecine.es
Lo que si da la sensación, viendo los compañeros de reparto masculinos en esas primeras películas, es que la Davis estaba ya a otro nivel. Ellos parecen meras comparsas. Atrapaba la cámara con esos ojazos a los que tan bien cantó Kim Carnes.
Mi blog: www.criticodecine.es
EX-LADY (1933) de Robert FLorey.
Filme pre-code de apenas una hora y unos minutos de duración, cuya copia se ve bastante bien, al menos en el sentido visual he podido disfrutar con una película 100% Bette Davis, ya que ella es la verdadera protagonista, quizás su primer protagónico de gran calado, aparece en casi todas las escenas; además de jovencísima, aparece muy delgada y estilizada, elegante con esos vestidos ceñidos de noche y sexy con esas negligés o camisones que aparece varias veces.
Su química con el rubio Gene Raymond es verdaderamente notable, creo que ambos tienen una muy buena química en las escenas amorosas, no se puede decir que sea un "lelo", aunque es verdad que su papel está supeditado a la diva...
También se agradecen las pocas notas de humor a cargo del típico secundario gracioso de los años 30: Frank McHugh, porque el resto de secundarios apenas destacan en sus breves roles.
Lo peor de todo es el guión, muy repetitivo, algo cansino, no va a ninguna parte la trama, finalmente se hace algo empalagoso tanto te quiero y no te quiero...
Personalmente si no fuera por Bette Davis, sería un título totalmente olvidable, a pesar de su comienzo potente, poco a poco va perdiendo fuelle.