Coincido plenamente con la exposición de Repopo.
Antes de lanzarme por un precipicio, sin saber si hay colchón al final de la caída, llamaría a los que viven en el fondo para que me confirmasen el mullido; o lo que es lo mismo: sin un BDInfo fiable (y aún así continuaría poniendo Spanisch) no me fío. Tan sólo una reproducción en un lector, por un hispanohablante de España, o un experimentado alemán podría darnos el dato definitivo del castellano.
Incluso yo, hablando un alemán adquirido (no nativo), no diferencio, si no es por palabras o modismos regionales, del alemán de Hannover, al de Austria, o la zona de habla germana de Suiza. A los bávaros sí, que dan mucho el cante.
Si pregunto al vendedor de esa tienda si tiene castellano, me va a responder que tiene español al 100%. Que sea castellano, es otra historia. Con esta edición nos jugamos más que la inclusión del idioma, nos jugamos que Fox haya abandonado el mercado de España definitivamente. Mucha prudencia.