Iniciado por
Charles Lee Ra
Vista anoche, ¡al fin! La nueva versión de "Asesinato en el Orient Express", la sensación que se me queda es la de haber ido al cine a presenciar una obra maestra.
En el apartado formal, la película estaba por encima de todo lo demás que había en cartelera en aquel momento: fotografía, música, reparto, equipo técnico... la película es una delicia para los sentidos. y a pesar de ir a la sesión de las 22:25, ninguno de mis acompantes soltó un bostezo. La película se pasa como un suspiro.
Como admirador tanto de la novela como de la previa versión, pensaba que iba a tener dificultades en disfrutar de una nueva versión, pero no ha sido así. Está a la altura, de sobra.
En general es una película de 10, aunque le he puesto un 8. Hay algunos detalles que no me gustaron. Especialmente, el final.
A partir del momento en que Michelle hace su "revelación" (estamos no ya ante el mejor momento de la peli sino ante uno de los mejores momentos de la carrera de la actriz) hay un exceso de verborrea y de sentimentalismo, en mi opinión, va en contra del espíritu de la propia película. Branagh Se excede demasiado en esos momentos, me resultó totalmente anticlimático, aquella solemnidad. El discurso de Michelle, no solo soberbio sino que extraído casi punto por punto de la novela, es excelente. La posterior reacción de Poirot y su discurso a partir de ahí me parecen inadecuadamente solemnes.
En general, los actores excelentes todos.
Algunos cambios operados en personajes me parecen incomprensibles, los que más traicionan el espíritu original son el matrimonio diplomático. Tanto en la novela como en la película eran un matrimonio "de mundo", enamorados el uno del otro y feliz, y si bien el conde era un hombre acostumbrado a mandar y muy celoso de que no molesten a su esposa, no entiendo a que obedece aquí su carácter violento, más propio de un matón de la mafia que de un noble diplomático.
La película se toma un par de licencias cinematográficas, ausentes en las obras anteriores, persecucines y disparos imagino que para dar fluidez a la trama.
En general, los interrogatorios están mucho mejor resueltos en la película de Lumet. No solo son más completos, dando oportunidad a cada actor de tener un momento para él, sino que ayudan a subrayar el tema Armstrong y la locura que se vivió en aquella casa. Aquí los han liquidado muy rápido.
Con sus pequeñas cosas, una obra maestra.