
Iniciado por
javialacarga
No tiene absolutamente nada que ver con puritanismo ni con "tratar algo de una manera natural", porque no sé si lo sabes pero en una película cuando se acuestan no lo hacen de verdad, son actores, luego ahí no hay nada "natural" que preservar. Es todo artificial de una forma u otra, y en lo que consisten estos roles es simplemente en vigilar que no se produzcan abusos.
La película me ha gustado bastante. No me parece una comedia, aunque entiendo que contiene humor, pero para mí no es lo mismo. De hecho yo la encuentro bastante triste (tampoco es que una comedia no pueda ser triste, en realidad). No sé qué me atrae exactamente de las dos películas que he visto de Sean Baker, especialmente esta última que es la que me ha gustado más, pero quizás diría que es el hecho de que se percibe una cierta autenticidad que de entrada uno no quizás esperaría. De hecho, con una sinopsis de la película que haría pensar en La Cenicienta o Pretty Woman antes que en ninguna otra cosa, con ese tono como de cuento de hadas (o de Hollywood) en el que cierta dramatización o exageración son inherentes (pienso por ejemplo en la caracterización del oligarca y su mujer, que harían un poco las veces de villanos del cuento), me sigue pareciendo que se percibe mucha autenticidad. No sé si exactamente los actores, en los diálogos, en la progresión de la historia, pero siempre me parece que incluso dentro de la estilización de la realidad que es la película, se respira una cierta honestidad que es refrescante.