Análisis a fondo del Nexus 7 por los compañeros de Engaget:
Google Nexus 7, análisisTras lo que ha parecido una eternidad llena de rumores y filtraciones, prácticamente cuesta creer que Google ya tenga en su catálogo un tablet propio para completar la gama Nexus. Como puedes imaginar, la compañía no ha querido escatimar en prestaciones en su nuevo ojito derecho, presentando un manejable equipo de 7 pulgadas que estrena en primicia la última versión de su sistema operativo y llega dispuesto a hacer frente a los grandes con un precio de lo más competitivo. Pero... ¿de verdad merece tanto la pena el ya célebre Nexus 7 cuando tenemos los escaparates abarrotados de tablets low cost? ¿Qué aporta exactamente Jelly Bean al ecosistema androide y hace a este dispositivo tan especial? Hoy hemos querido sentar en nuestra mesa de operaciones a la unidad para ayudarte a dar respuesta a estas y otras muchas cuestiones, así que ya sabes: ponte cómodo y prepárate para descubrirlo porque el interrogatorio empieza justo después del salto.
Presentación
Diseño
Por mucho que cueste creerlo, a pesar de su naturaleza de bajo coste el Nexus 7 cuenta con unos acabados lo suficiente razonables como para que pudiera pasar por un dispositivo mucho más elaborado.
La unidad de presenta con una carcasa de plástico de un indescriptible color entre el marrón y el negro con un curioso tacto gomoso que casi aparenta ser cuero, así como una peculiar textura punteada que parece querer imitar al volante de un automóvil. Gracias a sus siete manejables pulgadas y sus 340 gramos de peso, la unidad resulta bastante cómoda de manipular y transportar. Sí que es cierto que su grosor de 10,45 mm hace a esta tableta algo más rechoncha que otras que han pasado últimamente por nuestra mesa de trabajo, pero la sutil curvatura de sus laterales sigue adaptándose bien a las dimensiones de nuestra mano. A nivel de construcción es difícil ponerle alguna pega al primer vistazo: nuestro protagonista se siente ligero a la par que resistente, algo que se agradece en un juguete de batalla como este; eso sí, su cuerpo no está exento de algún que otro crujido inesperado si presionamos con algo más de fuerza de la necesaria (por algún lado tenía que asomarse su naturaleza low cost, qué le vamos a hacer).
Entrando ya de lleno en nuestro habitual recorrido por su anatomía, nos encontramos con su cara frontal, capitaneada por completo por una pantalla de 7 pulgadas con tecnología IPS, una resolución de 1.280 x 800 píxeles, 400 nits de brillo y una capa de cristal protector fabricada por Corning (aunque no es Gorilla, y de hecho una unidad previa a la utilizada en este análisis se fue con un buen arañazo); sobre esta se coloca la única cámara presente en el equipo -de 1,2 megapíxeles y capaz de grabar vídeos a 480p- y nada más, porque como en otros dispositivos androides de reciente nacimiento, la clásica botonera del sistema operativo de Google se proyecta ya directamente en el propio panel, dejando obsoletas a las teclas táctiles retroiluminadas que tan acostumbrados estábamos a ver. Tampoco es que haya mucho más en su punteado reverso, limitándose a mostrar las marcas Nexus y ASUS con unos atractivos surcos y finalmente su alargado altavoz (descuida, que hablaremos en breve y con algo más de detenimiento de la falta de una cámara en sus cuartos traseros).Esta sencillez extrema está también presente en sus metálicos laterales, reservando la zona alta del costado derecho para la tecla de encendido o bloqueo de la pantalla y el control de volumen, la inferior para el puerto microUSB de carga y la toma de 3,5 mm para auriculares y la izquierda para los tres puntos de contacto de un dock, quedando desnuda su parte superior. Evidentemente el botón dedicado para la cámara estaba más que descartado, pero desde luego sí que echamos en falta una ranura para ampliar su almacenamiento o un puerto HDMI para sacar aún más partido a su faceta multimedia.
Hardware
Google y ASUS han demostrado que han querido hacer bien los deberes antes de presentarnos a su retoño, dando tanta importancia a su forma como a sus especificaciones. Es por ello que a continuación te dejamos una pequeña recopilación de sus características más destacadas para que puedas repasarlas con algo más de detalle.
Multimedia
Una de las primeras cosas que se resienten al reducir el presupuesto para diseñar un dispositivo es su pantalla y, como puedes imaginar, el Nexus 7 no es una excepción a esta regla. Es por ello que la unidad ha tenido que conformarse con un panel de 7 pulgadas con una modesta resolución de 1.280 x 800 (que le otorgan una densidad de 216 ppp) y 400 nits de brillo. Evidentemente ante semejante panorama, nuestro protagonista no está en igualdad de condiciones como para plantar cara a un iPad con pantalla Retina o cualquier otro equipo de gama alta que se te pueda ocurrir; sin embargo, pese a estas "limitaciones" el ojito derecho de Google y ASUS cumple con su cometido de una manera adecuada. Por un lado, la tecnología IPS de la que hace gala consigue unos buenos ángulos de visión, logrando un tratamiento del color adecuado incluso desde las perspectivas más forzadas; mientras que por el otro, su alto contraste lo convierten en un compañero ideal al aire libre. Por si esto fuera poco, por comedida que pueda sonar su resolución, dadas sus 7 pulgadas de tamaño no hemos encontrado problemas graves en el renderizado de texto ni en la reproducción de contenidos en alta definición. En definitiva, que como en los epígrafes anteriores -y sobre todo en el apartado de rendimiento, del que hablaremos largo y tendido dentro de poco-, nos hemos llevado una muy grata sorpresa con el Nexus 7.
En una sección como esta no podíamos dejar de mencionar su destreza a la hora de lidiar con archivos de bastante peso como pueden ser las imágenes de prensa en alta resolución que recibimos durante la presentación de algún producto, webs cargaditas de contenido multimedia o un vídeo en alta definición. Es en este último apartado donde sí que nos hemos llevado una pequeña decepción: viendo que el Nexus 7 logra sobrepasar con nota todas las expectativas, casi nos ha llamado la atención verlo flaquear ligeramente en una parcela como la del audio. De un lado se encuentran las distorsiones que sufre el sonido si tratamos de subir el volumen más de la cuenta (especialmente importantes en los graves), mientras que del otro, no terminamos de situarnos con la posición del altavoz, amortiguándolo notablemente si decidimos sujetar el tablet en horizontal con la mano derecha o sobre las rodillas en posición vertical. Con esto no queremos ni muchísimo menos descartarlo como reproductor multimedia para quienes de vez en cuando gustan de curiosear un vídeo en YouTube, pero si te importa la calidad del sonido, es muy posible que prefieras tirar de auriculares.
No queríamos cerrar este bloque tan centrado en el entretenimiento sin hacer mención a la ausencia de una cámara en su zona trasera (quevaaale, admitimos que hacer fotos con un tablet no es la experiencia más cómoda del mundo, pero desde luego en circunstancias puntuales te puede sacar de un apuro). Ante la sorpresa generalizada que provocó este detalle, la propia ASUS tuvo que salir a la palestra para explicarlo: en pocas palabras, sus creadores argumentaron que las limitaciones impuestas por el presupuesto no les permitían optar por un sensor de gran calidad, de modo que prefirieron prescindir totalmente de él antes que instalarle una cámara cutrecilla que pudiera desprestigiar al producto completo. De todos modos, no lo des todo por perdido porque con lo que sí que cuenta es con una cámara frontal de 1,2 megapíxeles con una resolución de 480p. "En teoría" fue pensada para realizar videoconferencias... pero que con el tiempo ha acabado sucumbiendo a los encantos de Instagram e incluso ha aprendido a grabar vídeos a 720p; es más, como nota curiosa, cuando la tableta llegó a nuestras manos ni siquiera disponía de un acceso directo a la aplicación de cámara, circunstancia que apañamos descargando una aplicación gratuita de MoDaCo llamada Camera Launcher for Nexus 7 desde Google Play (todo tiene arreglo, vaya).
Rendimiento y autonomía
Llega el momento de poner cifras concretas a las buenas sensaciones que nos ha dejado el Nexus 7 en nuestro día a día. Para ponerte en perspectiva no podemos dejar de mencionar que el cerebro de esta tablet es un Tegra 3 de cuatro núcleos a 1,3 GHz acompañado de 1 GB de memoria RAM. Gracias a ello, apenas 29,10 segundos después de presionar la tecla de encendido la unidad empieza a moverse grácilmente y sin titubeos en la mayoría de situaciones. Las aplicaciones cargan con rapidez y responden de manera correcta a nuestras peticiones (incluso aunque nos empeñemos en buscarle las cosquillas su procesador logra salir a flote sin despeinarse).
Como de costumbre, hemos querido someter a nuestro protagonista a algunas de las pruebas de rendimiento más conocidas del entorno androide, y tras realizar tres pases diferentes, hemos comparado la media con la cosechada por otras tablets que han ido pasando por nuestra mesa de análisis recientemente y hemos resaltado en verde el mejor resultado.
Google Nexus 7 Motorola Xoom 2
MEASUS Transf. Prime Samsung
Galaxy Note 10.1Quadrant 3.614 2.510 4.137 3.996 Vellamo 1.650 - 1.418 2.256 AnTuTu 10.858 4.935 10.261 15.392 SunSpider 0.9.1 (ms) 1.708 2.055 1.861 1.633 GLBenchmark Egypt Offscreen (fps) 64 - 68 99,3 CF-Bench 11.482 13.110 11.861 13.157 SunSpider: las puntuaciones más bajas son mejores
Para nuestra sorpresa, pese a ser un equipo de bajo coste, los resultados del Nexus se acercan bastante a los obtenidos por el procesador Exynos 4 core del Galaxy Note 10.1, un dispositivo que como posiblemente recuerdes, sí que presume de jugar en la liga Premium. Donde quizás sea más destacable el salto es en la comparativa con el Xoom 2 Media Edition, otro siete pulgadas pero con procesador Cortex A9 de doble núcleo, que sí se queda algo más atrás frente al paso decidido con que se mueve la tablet de Google.
Como siempre, no podemos hablar de rendimiento sin mencionar el impacto que este apartado tiene en la autonomía del equipo. Nuestra unidad de análisis ha logrado resistir en activo nada menos que 9 horas y 46 minutos en nuestra sesión intensiva de prueba a su batería (consistente en la reproducción en buque de un vídeo en alta definición con el brillo y el volumen ajustados a la mitad, mientras el WiFi permanecía encendido pero no conectado). Con un uso algo más relajado, leyendo nuestros feeds, mirando algún que otro vídeo de YouTube al día y jugando de vez en cuando, no hemos tenido problemas para estirar su autonomía hasta los tres días de uso.
Software
Tampoco podemos pasar por alto que nuestro protagonista es el primer dispositivo que ha llegado al mercado ejecutando Android 4.1 Jelly Bean y es precisamente a esta novedad a la que la unidad debe gran parte de su encanto. Para esta versión con sabor a habichuelas de gelatina, la plataforma se ha hecho mucho más intuitiva si cabe, ofreciendo una mayor integración entre sus diferentes servicios y un nuevo sistema de notificaciones centralizadas, pero también algunos retoques entre bambalinas, como un mejor seguimiento a nuestros dedos o más agilidad a la hora de saltar de aplicación en aplicación, de modo que la evolución se nota y, desde luego, se agradece.
La joya de la corona es sin duda Chrome, que puede presumir ya de ofrecer una experiencia muy similar a la de su homólogo de escritorio con sus pestañas, sincronización de servicios con nuestra cuenta de Google (sin necesidad de plug-ins adicionales), fácil acceso a su menú y un funcionamiento prácticamente impecable. El clásico teclado virtual androide también se ha renovado para la ocasión, disfrutando ahora de un sistema de recomendaciones de escritura que nos recuerda sospechosamente al propuesto por SwiftKey. Tres cuartos de lo mismo ocurre con su pantalla de desbloqueo, un círculo que -sin llegar a ser tan versátil como el anillo de Sense-, sí que nos brinda un rápido acceso directo al buscador de la casa.
Ya hemos hablado antes de que Google ha preferido mantener una sencillez extrema para su primer tablet y el ejemplo más claro sea quizás que ni siquiera una aplicación tan básica como Reader viene instalada por defecto para no ocupar sitio innecesariamente en su memoria en caso de que no la utilices (si la echas de menos, puede descargarse sin problemas desde Play). Precisamente hablando de apps, cabe señalar que Jelly Bean permite ahora que los iconos se reorganicen solos cuando desplazamos un widget por la pantalla y, en caso de que no tengamos suficiente espacio, lo redimensiona automáticamente -lo que seguimos sin explicarnos es que sus escritorios no giren cuando colocamos el tablet en apaisado, una cualidad que sí estaba presente en Honeycomb.
Sin entrar en polémicas sobre la conveniencia o no de utilizar un tablet como e-reader, nuestra experiencia ha sido aceptable tanto en condiciones de baja iluminación -ya fuera con el brillo de su pantalla al mínimo o haciendo uso de modo nocturno-, como en exteriores. Esto se explica en parte no sólo por un cómodo tamaño que te permite sostenerlo con una sola mano durante un buen rato, sino también su agilidad a la hora de pasar las páginas con una vistosa animación gracias a su versátil procesador (y qué le vamos a hacer, bienvenido sea todo lo que nos ayude a aligerar peso en nuestros bolsos y mochilas).
Conclusión
Llega el momento de hacer balance de nuestra la experiencia con el Nexus 7 tras estos días de prueba y la sensación general es muy positiva. Con lo concurrido que está el mercado tabletoide, esperábamos grandes cosas de Google cuando por fin se decidiera a ofertar un equipo de estas características y desde luego en esta primera incursión no ha decepcionado en absoluto. Con la ayuda de ASUS, la firma de Mountain View ha logrado dar con un equilibrio -caaasi- perfecto entre eficiencia, usabilidad y diseño, contando además con el plus de llevar colgando una competitiva etiqueta de precio.
Entre los apartados que más nos han gustado se encuentran la solidez con que está construido el dispositivo (un agradable soplo de aire fresco en el segmento de bajo coste), su notable rendimiento cuando nos ponemos exigentes y el buen hacer de su pantalla incluso cuando las condiciones no son las óptimas. Mención aparte merece Android 4.1 Jelly Bean, por haber dado un salto importante salto hacia delante y haberse convertido en una plataforma mucho más estable e intuitiva -no nos cabe la menor duda de que incluso los más profanos en la materia lograrán familiarizarse rápidamente con su funcionamiento y llegarán a apreciar sus encantos.
De todos modos no te creas que todo ha sido un camino de rosas, porque a nuestro protagonista aún le quedan algunos detalles por terminar de rematar, como por ejemplo su limitado almacenamiento interno (sólo está disponible en versiones de 8 ó 16 GB), la calidad de audio por culpa de la posición de su altavoz y la ausencia de una cámara trasera en estos tiempos que corren -¿tal vez para futuras generaciones? Aun así, no nos tiembla el pulso a la hora de reconocer que Google y ASUS han logrado marcar un hito en el segmento de los tablets de bajo coste, y es que después de haber jugado con este Nexus 7, nos hemos quedado convencidos de que un tablet económico puede presumir de un aspecto atractivo y también desenvolverse con soltura.
En caso de que estés dispuesto a dar una oportunidad a lo último de Google, debes saber que el Nexus 7 ya está disponible a nivel global por precio de entre 199 (versión de 8 GB) y 249 euros -modelo de 16 GB.