La vi en preestreno el pasado día catorce y me pareció correcta y disfrutable, pero lastrada por su acumulación de fan service. Fede Álvarez ha puesto en una coctelera muchos de los momentos más recordados de la saga y los ha ofrecido, con un resultado estimable, pero que a mi juicio lastra el filme. La parte final se aparta un poco de lugares comunes y trillados y ofrece algo novedoso y perturbador que hace que la película levante el vuelo.