Coincido en qué el "bisho" está agotado.

Las mejores partes de Romulus son las que suceden antes de su entrada en escena. A partir de ese momento, es un circo de tres pistas donde casi todo es un revival, y la innovaciones son demasiado estramboticas y repetitivas como para tomarlas en serio.

Me quedo con Prometheus y sus ideas, donde las tres pistas del circo eran más interesantes.