Pues a mi sus incursiones animadas (sobretodo las dos últimas), me parecieron formalmente impecables, como acostumbra.

Cómo películas, Beowulf y Cuento de Navidad (la historia de esta última me puede, soy un tierno de toda la vida ), las veo notables, y Polar Express un experimento audaz interesante, aunque no carente de virtudes.


Eso si, lo de Silvestri es una verdadera pasada, sin discusión, cómo viene siendo habitual con su viejo amigo.